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David Guetta ya puede aprender gaita
Cinco gallegos y una vallisoletana forman en Eivissa el grupo Ardello Eixo, que imparte clases y ofrece actuaciones en vivo.
Si al famoso dj francés le diese el capricho de querer tomar clases de gaita en Eivissa el próximo verano, tal vez para incluir sus sones en su próximo hit, podría hacerlo sin problemas. Por primera vez la isla cuenta con una formación gallega, Ardello Eixo, cuyos componentes también dan clases a quien esté interesado.
Como sucede con casi todos los proyectos que cuajan, este ha nacido gracias al empeño que le ha puesto una persona. Se trata de Javier Vázquez, nacido en Muxía, un auténtico virtuoso de la gaita. Comenzó a tocar con nueve añós y cuenta con numerosos premios en Galicia tanto como solista como dentro del cuarteto "Comarea" que todavía mantiene en la distancia. Motivos personales le trajeron a Eivissa hace cuatro años. "Trabajaba en la mar, pero a mi novia la mandaron a Eivissa porque es funcionaria y sacó plaza aquí, con lo que al final acabé instalándome y ahora trabajo en GESA", explica. Pronto se dio cuenta de que, o seguía tocando, o la morriña por el instrumento sería insoportable.
Conoció al también gallego Arturo Rodríguez, que le explicó que en el Centro Galego de Sant Antoni daban clases, pero muy básicas. Esto animó a Javier a proponerse impartir gaita y percusión tradicional gallega "en serio". Después contactó con Braulio Rodríguez y a él le siguieron Serafín Prado y más tarde Teresa Moyano y Marta Vázquez, que son los seis componentes de Ardello Eixo. En total, cinco gallegos y una vallisoletana (Teresa).
El grupo nace a raíz de la pasión de Javier Vázquez por la gaita, que quería seguir tocando en Eivissa como fuese
Braulio Rodríguez es de Zas, un pueblo de la Costa da Morte. Lleva en Eivissa diez años y, como Javier, toca la gaita desde niño aunque la tenía un poco abandonada. "Vine a la isla a pasar un verano y aquí me quedé. Estoy casado con una ibicenca y trabajo de maestro de Primaria", explica "He tenido muy aparcada la gaita hasta que el día de mi boda, aquí en Eivissa, me la trajeron por sorpresa, porque ni siquiera la tenía en la isla. Realmente no salió del canapé bajo la cama hasta que Javier me llamó y reengaché", explica, contento de haber retomado la música.
Por su parte, el santiagués Arturo Rodríguez recaló en Eivissa hace 33 años después de viajar y trabajar por media Europa, desde Alemania a Inglaterra, pasando por Bélgica, donde conoció a su mujer. Visitaron juntos Eivissa y a ambos, que venían de tierras un poco grises, les conquistó su luz. "La morriña no desaparece del todo pero la isla nos encanta", confiesa Rodríguez, que se ocupa de la percusión en el grupo.
Serafín Prado, que procede de una aldea de Porriño, en Pontevedra, conoce Eivissa desde 1987 pero no fue hasta hace 15 años cuando se asentó en la isla para trabajar en la construcción. "Aunque Eivissa ya no es lo que era me sigue gustando muchísimo, sobre todo por el clima", confiesa el gaitero.
La propuesta de Ardello Eixo ha gustado en Eivissa y desde su formación en 2011 han tocado en fiestas como las de es Cubells o Puig d'en Valls con gran éxito, además de organizar un Magosto -nombre con el que se conoce en el norte a la fiesta de la castaña-, con toques galaico-ibicencos que tuvo muy buena aceptación.
Braulio Rodríguez asegura que su objetivo es doble, "tanto consolidar la formación principal como tener las puertas abiertas para que aprenda cada vez más gente [retoman las clases en enero, después de fiestas] ya que sin cantera es imposible dar continuidad a la idea". Javier Vázquez, en la misma línea, asegura que el objetivo, una vez creado el grupo, "es tocar cada vez mejor, ir subiendo nivel hasta donde se pueda". "No se trata de hacer la Real Banda de Gaitas de la Diputación de Ourense [que tiene más de 60 miembros]". dice entre risas, pero sí "continuar".
En Eivissa gusta lo gallego
Todos coinciden en que a los ibicencos les gusta el folclore gallego. "La gaita es un instrumento de fiesta, que llega mucho a la gente porque está a pie de calle, es cercano. Es de celebración y da alegría", remarca Vázquez. "Me llevo muy bien con Toni Marc, que hace las flautas tradicionales en Eivissa, y a ambos nos gusta ver las semejanzas y diferencias entre el folclore de la isla y de fuera. Es cierto que el ibicenco es un baile con menos influencias, que se basa en unos ritmos muy concretos, no se parece a nada que puedas ver en otro lugar", añade el músico.
Los que deseen contactar con el grupo para tomar clases pueden hacerlo en su página de Facebook 'Adello Eixo', o en el teléfono 647 05 07 88.
Diario de Ibiza, domingo 16 de diciembre de 2012
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